Lucía y Saul confiaron en mi para recoger las emociones de uno de los días mas importantes de su vida. Para mi, no solo era un reto fotográfico, también me une el parentesco familiar y suponía para mi, vivir muchos momentos de emoción y también de gran responsabilidad a la hora de capturar los momentos mas importantes. Una vez superados los primeros miedos, simplemente tuve que acordarme de la frase de un gran fotógrafo:
“Fotografiar es colocar la cabeza, el ojo y el corazón en un mismo eje”. Henri Cartier-Bresson