Los árboles, representan la vida en movimiento, muerte y nuevo crecimiento. Además, vinculan simbólicamente cielo, tierra e inframundo. Muchos de ellos son sagrados y se asocian espíritus concretos. Los árboles frutales se ligan a menudo al árbol de la vida. Los árboles de hoja perenne denotan inmortalidad y los caducos, renacimiento. Los árboles son fuentes de subsistencia, refugio, material de construcción y leña, e históricamente, se han asociado con la fertilidad, longevidad y fuerza. Los árboles, están cargados de una expresividad y una naturalidad, que son para mí una fuente incansable de inspiración fotográfica.